American Beauty , o Belleza americana

Acabo de ver esta película y no me resisto a contar lo que he sentido. No voy a repetir nada de lo que se ha dicho de esta historia tan magistralmente contada. Los calificativos serían interminables y cualquiera los puede ir contando si entra en Filmaffinity o en cualquier otra reseña. La película fue hiperpremiada, y con razón. Nadie que la esté viendo puede adivinar qué sucederá en el siguiente fotograma o secuencia, pero todos sentirán un pellizco en sus conciencias. Luego, dirán que han visto una película extraordinaria, y cuando le pregunten por qué, no sabrán contestar con coherencia: «brutal!!», dirán, y habrán quedado satisfechos de su definición. Que esto suceda en Norteamérica es menos importante, aunque ya es importante que los norteamericanos tengan el valor de contar sus miserias sin tapujos. Habrá otras historias magníficas, pero esas no acreditan que sean contadas por norteamericanos, cualquiera las puede contar y se dirá de ellas que son bonitas.

Si todo o parte de lo que se cuenta en esta película responde a una realidad subyacente en el American Way of Life, en El Sueño Americano, entonces se ha de concluir que esa frase sólo es un slogan. Que la realidad puede ser que un contagio universal es posible en cualquier parte del mundo. Conozco algo ese país y puedo afirmar que los cineastas americanos aquí sólo han pretendido que se salga del sueño americano, y que nada de American Way of Life se concreta en lo que muestra esta película. Si la veis, sería justo que la ubicarais en vuestra nación, vuestra ciudad y hasta en vuestra propia casa. Por el hecho de ser brutal no quiero decir que es inconcebible, lo que quiero decir es que al verla uno mismo despierta de un sueño: «la vida es hermosa, como pétalos de rosa que acarician tu corazón». No confundir los pétalos de rosa roja que se ven en la película con las manchas de sangre.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.